Un día cómo hoy pero ya hace un año atrás, decidí compartir lo que escribo con las personas que se tomaran algunos valiosos minutos de su tiempo para leer mis locuras.
Mi blog nació gracias al apoyo e impulso de mi amiga
Martu, ella pensó que mis pequeñas composiciones no debían quedarse guardadas en mi mesita de luz, que ya era tiempo de dejarlas volar para que llegaran muy lejos.
Recuerdo que mi primer post hablaba de un comienzo, aquellas tímidas palabras me fueron dando confianza y ganas para intentar crear y superarme todos los días.
Tener un blog no es tarea fácil, a veces las palabras no salen, la inspiración se va de viaje sin avisar cuando regresa, una situación te refleja, usas el mejor disfraz para ocultarte pero los que te conocen saben que sos el protagonista de esa historia, y los que no te conocen interpretan un texto según su punto de vista.
En mi rincón azul pude soltar mi imaginación, regalar posts, expresar mi eterna admiración por Soraya, intenté rescatar a la ternura, disfrutar de la nostalgia, escribir sobre suspiros, de los amigos de verdad, hablar de sueños y de ese que me dio la vida. En mi lugar encantado reina la paz, el amor de verdad existe y todo puede ser posible, Valentino y Alfonsina son la mejor prueba de eso.
Debo confesar que por mi cabeza pasó la idea de darle unas largas vacaciones al blog, y había elegido esta fecha para hacerlo, pero creo que aún tengo mucho que escribir aunque mi inspiración siga reposando, todavía hay historias que inventar, sentimientos que expresar, locuras que compartir, y muchas estrellas fugaces por caer.
A todos ustedes gracias por el tiempo que me regalan al pasar por mi lugar encantado, espero que en cada visita hayan encontrado la calidez que intenté dejar en cada palabra.