Dolor


Que se agote de intentarlo, que se canse y pueda aceptarlo.
Que no encuentre mi viejo buzón, ni las líneas de mi mano.
Que no vaya al mar, que no rompa en olas, que no encuentre mis huellas en la arena imborrables y solas.
Que no vuelva, ya no vivo en mis trincheras, que lo lance dardos, ni balas perdidas que no rocen mis cicatrices que aún no sanan mis heridas.
Que lo alejen, no quiero pactos ni treguas, ya nos vimos a la cara, ya no quiero que su presencia siga tallando piedras en mi espalda.
Que saque lo ha instalado en mi habitación, la noche más oscura para robarme el menguante de la luna desnuda.
Que lo lleven lejos, en vuelo sin escala, que encalle en playas vacías y mudas...Que naufrague!
Que lo alejen, que se olvide de mi nombre, ya me he sentido demasiado viva en favor de su nombre. Yo no quiero nada y él me ha quitado todo. Yo aún lo intento todo aunque él con su brisa me amenace desde mi ventana.
Ya pagué deudas propias y ajenas, y aquellas que no merecía con elevados intereses. Ya es tiempo de que partas, que te vayas con el tirano, ese...Que lleva veneno en sus venas, clavos en su almohada, hierro en su alma, ecos de sus victimas que atraviesan su cabeza como las paredes de lo que una vez fueron sus victorias.

Trozos de papel


En un mundo cada vez de más consumo y más materialista, darle valor a las cosas sencillas es de pocos valientes, que aún creen y suspiran por esas cosas que quizá pueden cambiar el mundo y tú no te has dado cuenta.
Como pequeños trozos de papel atrapando inspiración, tal vez tú eres el motivo de esa creación y no te has detenido a descubrirlo, y por andar perdido no notaste que eres la causa de un instante y un suspiro.
Trozos de papel que soltó la luna llena, para que no le faltara donde escribir a los que le dedican serenatas, y regresaran a cantarle cuando estuviera menguando una noche fría y solitaria.
Trozos de papel que terminaron siendo verdaderas obras de artes, y para su autor seguramente la mano a la que se aferró aquella noche que extrañó tanto que agotó los recuerdos.
Trozos de papel que repartiste en una esquina, con la esperanza de que en la plaza fueran a ver a la artista callejera de tu vida, sin esperar más que aplausos y sonrisas de propina.
Trozos de papel que has escondido en los bolsillos de un jean, tal vez alguien en un abrazo busque su regalo en letras. Una poesía? Una canción? Versos? O tal vez pedacitos de amor?
Lo importante es que se olvide de la rutina y quiera perderse buscando lo que inspiró.


Alejandro Sanz y Vanesa Martín
-Deja que te bese-