Último post del año de la mano de Valentino y Alfonsina





Valentino sentado al pie de su ventana comenzó a contemplar a las personas que caminaban en la calle, con la curiosidad que tienen los niños, la inocencia de un alma pura, y la madurez de aquellos que crecieron antes de tiempo intentó entender lo que estaba viendo y escuchando.
Alfonsina encontró a Valentino tan callado y preocupado que al instante quiso saber que estaba sucediendo.

-¿Por qué estás tan callado Valentino?. ¿Te sientes bien?.
-Si, si estoy bien, algo decepcionado nada más.
-¿Decepcionado por qué?. ¿Alguien te hizo algo?.
-No es algo, o alguien, es un conjunto de cosas que helaron mi corazón con sólo sentarme a escuchar y mirar.
-¿Me puedo sentar a tu lado y hablamos del tema?.
-¿Ves Alfonsina a toda esa gente en la calle que camina sin pausa?.
-Si los veo. ¿Qué pasa con ellos?.
-Todos caminan ensimismados, nadie mira para el costado, todos se quejan de lo mismo: que el dinero, los negocios, el poder, el odio, la rutina, el trabajo, de eso que “no tienen”, la envida, todos ostentando en una especie de competencia quien compra el objeto más caro, la política, la crisis.
-¿Y por eso estás así Valentino?.
-Estoy así por las cosas que no vi, que no escuché. Nadie pasó hablando de lo mágico y especial de estás fechas, de la familia, la importancia de un detalle de esos que salen del alma y no del bolsillo, nadie dijo que afortunado soy porque todos los que amo están bien y conmigo. Nadie mencionó que esperaba un abrazo, un llamado, una visita. Que estaba feliz porque tenía lo suficiente para ser la persona más afortunada del planeta. No vi a personas tomadas de la mano, no llegaron a mi ventana ecos de un suspiro.
Estoy así porque todo da igual, nadie se detuvo para ayudar a un chico que caminaba descalzo, ni al anciano con aspecto cansado y triste. Nadie pensó que eso que le sobra a alguien le falta.
Estoy así porque todos son demasiado grandes para creer en los reyes magos. Porque la navidad vale por lo que dejen los números, y no por su real significado. Estoy así porque nadie mencionó la palabra esperanza cuando vieron el 2009 a la vuelta de la esquina.
Estoy así Alfonsina porque no vi la presencia del amor en ninguna de esas personas que iban vestidos de seres humanos.

Los dos se quedaron en silencio y pensando. Alfonsina entendió la decepción de Valentino y siguiendo los impulsos de su corazón habló:
-Yo sé que a veces las palabras sobran, y que el silencio puede ser la mejor respuesta, pero déjame decirte que todo ese dolor, la decepción por lo que viste perdido es el mejor ejemplo de que no todo está perdido. Veo tus ojos y la magia de los reyes magos será eterna, el inicio de cada año renovará todas tus ilusiones, y la navidad está mas a salvo que nunca, porque mientras existan más seres como tu al mundo le que queda una esperanza.


Decidí dejar mi mensaje para estas fiestas de la mano de Valentino y Alfonsina, esos seres que mucho de ustedes me lo han dicho son muy importantes, y le imprimen toda la ternura a mi rinconcito azul.
Este blog se toma vacaciones por unas semanas, la verdad que lo necesito física y mentalmente. Gracias a Dios voy a pasar la navidad, terminar el año y empezar el 2009 con mi gente, esos seres que amo desde los más profundo de mi ser.
A todos ustedes que se tomaron la molestia de leer cada locura que pude expresar acá, ¡gracias por eso!!! y por alimentar un poquito mi ego.
Les quiero dejar una agradecimiento muy especial a dos amigas que conocen y muy bien a quien está detrás de las chica de las estrellas fugaces.
Martu: sin vos éste blog no existiría, mil gracias por todo el viento que le soplaste, le soplas, y le seguirás soplando a mis alas, la verdad no se donde llegaré con tanto impulso. Estoy feliz de que vengas de tu gran México querido, a mi pequeño Uruguay a pasar unas vacaciones increíbles, ¡te quiero mucho!!!.
Caro: –comenta en mi blog como la impuntual- a pesar de que empezaste a leer mi blog poco tiempo después que lo abrí aprendiste a conocer esa parte de mí que tanto me gusta, la de poder escribir y expresar todo lo que llevo piel adentro, hace mucho tiempo somos amigas, ahora compartís conmigo esa parte de mí que sólo estaba guardada en mis hojas sueltas y desordenadas, ahí junto con mi guitarra. ¡Te quiero mucho!!!.

A todos gracias por compartir éste mundo tan mágico: el de las palabras.
Que pasen las mejores fiestas de sus vidas, y disfruten de lo que realmente vale la pena: los afectos, y las cosas sencillas.
Les dejo una estrella fugaz para que nunca dejen de pedir un deseo, tal vez muy pronto se haga realidad.


¡Nos vemos en el 2009!!!

Soraya: un ángel con guitarra



Llegaste de repente una tarde gris de otoño, te instalaste en mi casa sin permiso y tus canciones me dijeron: quédate tengo mucho que contarte.
El amor en tus ojos me habló de una chica sencilla, de la avalancha de emociones que pueden salir con apenas unas pocas notas de tu guitarra, y de las ganas de regresar al pueblito viejo donde aprendiste a soñar.
Lejos de aquí llegaste a tocar el cielo, y de tu mano nos llevaste sin despegarnos del suelo, sólo con escucharte viajamos por París, Calí, Milán, y al regresar en el cruce de la realidad y los sueños pensé…¿será el final?, y no, afortunadamente era el comienzo.
Las cosas en la vida, no son fáciles, y en tu caso mucho menos, conociste esa calma antes de la tormenta que adelanta un final que te niegas a aceptar pero que tarde o temprano llega, y como un náufrago te quedas sin explicación y respuestas.
El tiempo no tardó en hacer de las suyas, y otra vez se repetía la misma historia, pero tu fortaleza y todos los que estaban a tu lado formaron un gran equipo para dar pelea, y que no fueras prisionera de aquel dolor que supieron conocer tu madre, tía, y abuela.
Tu cuerpo y alma en perfecta armonía y al unísono conjugaron el verbo poder, y aunque casi se te escapa la fe, y muchas veces le preguntaste a Dios…¿en dónde estás?, nos enseñaste que a pesar de todo, siempre, siempre hay una razón para creer.
Tu amor, mi amor son el mismo: la música, y fue gracias a la música que te atreviste a soñar, expresarte, vivir, luchar, y ser porque no un alma de la calle, para poder llevar tu mensaje y misión a los que más lo necesitaban. Por todo esto y más te convertiste en un ser amado, y el mejor espejo donde mirar para no bajar los brazos.
En un segundo lento todo cambió, y eso que se creías vencido volvió para probar una vez más tu gran espíritu. Secaste tus lágrimas con la promesa de apretar los puños y pelear contra un enemigo despiadado.
Aprendiste a vivir en un mundo sin prisa, diferenciando lo genuino del oropel, disfrutando de lo sencillo, agradeciendo el poder respirar un día más, y con la esperanza encendida como la llama de una vela, esa que siempre brilló en un rinconcito de tu casa.
Seguiste llevando tu mensaje y música por muchos países, alimentándote con cada aplauso, del dulce amor, ese que le inspirabas a todos los que aprendimos a disfrutar de tu arte, y admirar mucho más que un gran artista: el ser humano.
Con las cuerdas rotas de tu guitarra compusiste tu última y gran obra, la que llegó a tocar cada fibra de los que tuvimos la suerte de leer, aprender y emocionarnos con cada línea, crecer con tu experiencia, y gracias a ella admirarte más todavía.
Porque te quiero, y extraño mucho aún me pregunto como sería si la vida te hubiera dado más tiempo, tal vez tu lucha tendría otro final, tu guitarra no extrañaría tus manos, a la música no le harían falta tus canciones, y en esta noche al momento de tocar algunos acordes no sentiría tanto tu ausencia.
A pesar de mi dolor, ese que me asalta cuando no logro entender lo injusto que es todo a veces, me basta mirar mi mesita de luz para entender que con las cuerdas rotas puede sonar la mejor melodía, y agradecer por la herencia que nos dejaste a todos: tu ejemplo.


-Soraya: su música-

-Casi/Miento-
En vivo desde Viña del mar
Chile


-De repente-
En vivo desde Viña del mar
Chile


-Soraya: su misión-



Paciencia



Paciencia es algo que no todos tienen para dar, pero es justo lo que necesito.
Paciencia a un no mentiroso, y a un si impuntual.
Eso que a un pescador le sobra, y a un ansioso le falta.
Paciencia para sanar, entender eso que aún no puedo dar.
Paciencia sin prisa, calma sin pausa, miradas sin preguntas, y abrazos inmortales.
Paciencia incondicional, granos de arena de un reloj dispuesto a esperar.
Paciencia a unos pies descalzos que no saben llegar, y unas manos frías que se olvidaron de rezar.
Para los errores y ver si puedo andar, paciencia para desembalar un corazón con latidos vencidos.
Paciencia que te convierta en la criatura más noble, y a mí en el ser más egoísta, porque pido paciencia a gritos y ni yo misma la tengo.
Paciencia para llegar a un alma rota, y querer repararla a fuerza de suspiros.
Paciencia mágica, casi de adivino para soportar mis ataques de una batalla perdida.
No te pido que entiendas las discusiones artísticas entre mi guitarra y yo, pero que me dejes mientras escribo una canción.
Eso que el tiempo le regaló a un anciano sin preguntarle, y un niño no entiende a la hora de esperar a los reyes magos.
Paciencia que me rescate de un pasado que me obliga a esquivarle la mirada al futuro.
Paciencia al letargo de mis emociones, silencios afilados, y esas palabras que tal vez nunca escucharás.
A pesar de ser un desastre en algún lado tengo mucho para dar, y aunque no sé donde está todo eso algo de paciencia me puede salvar.
Paciencia para querer eso que aún no logro ser, paciencia para esperar mientras despierto, y darme cuenta que aún sigues ahí, aunque no me lo merezca.

Cumpleaños por dos




A mi me gusta regalar posts y más cuando se trata de una fecha especial y personas que quiero y son cercanas a mí. Este post es doble, va para mis dos grandes amigas Carolina y Mariela.


26 de noviembre cumple de Carolina


Caro: éste año fue un poquito difícil te han pasado cosas que no esperabas y mucho menos merecías, pero hoy cumplís un año más y eso es motivo mas que suficiente para celebrar, además se termina el año y con el dejás atrás esas cosas que dolieron mucho. Estoy segura que el siguiente año será todo lo contrario a éste y vas a vivir muchas cosas lindas, no tengas dudas de eso. Así que mucha fuerza, respirá profundo y sentí lo lindo que es estar vivo.
No importa si no me querés atender el teléfono cuando estás tristes, y evitas verme para no hablar de cosas serias, yo te quiero igual y siempre voy a intentar ayudarte aunque te escondas de mí, de verdad te lo digo, sabes que contás conmigo siempre, desde que nos hicimos amigas siempre fue así.
Que pases un día maravilloso, seguro que abrazos, sonrisas, regalos no te van a faltar, ojalá te guste éste humilde detalle pero no te preocupes te compré otra cosa, jajajajajaja, nos vemos más tarde para festejar. ¡Te quiero mucho morocha!!!



29 de noviembre cumple de Mariela


Marie: para vos también fue un año complicado, parece que a las buenas personas le pasa de todo, pero es increíble la fuerza que tenés, es admirable la forma como ves y encaras la vida, yo creo que te impulsan esos dos soles que tenés en tu casa, y de ahí te convertís en una súper mamá y no hay quien pueda con vos, apretas los puños y le peleas a la vida como viene. Siempre pienso que si algún día tengo un hijo me gustaría ser tan buena madre como vos.
Que tengas un hermoso cumple, la distancia no me va a permitir estar ahí, pero seguro te voy a llamar muchas veces por teléfono para acortar la distancia.
Te deseo todo lo mejor, y ya por favor que el próximo año te traiga sólo cosas buenas, le podemos pedir eso a los reyes ¿no?. Te quiero mucho brujita!!! –eso fue con cariño-.


Amigas, niñas, pequeñas, que se la pasen genial, y junto con éste año más de vida también venga todo eso que desean y se merecen, yo sé que tener una amiga como yo es genial, pero más cosas no estarían mal ¿no? Como que en la última parte del post me agrandé, jajajaja.



¡Felicidades!!!

Valentino y Alfonsina




Valentino y Alfonsina estaban sentados en la vereda como lo hacen siempre. Ahí cuentan estrellas, juegan bajo la lluvia, intentan llegar al final del arco iris, son los superhéroes más originales y únicos, se mueren de miedo. A veces son tan adultos que sorprenden, y a veces tan niños que te gustaría imitarlos.

Alfonsina encontró detrás de un árbol una bolsa de papel celofán con algo dentro que le llamó mucho la atención. Sin abrirlo corrió sin pausa junto a Valentino.


-Valentino, Valentino, Valentino, mira lo que encontré, no sé lo que es pero me parece tan hermoso que me da miedo abrirlo.
-Tienes razón Alfonsina parece un tesoro, ¿y si lo abrimos?.
-Tengo temor, ¿y si se escapa?.
-Si se escapa habrá sido libre, pero si se queda encerrado perderá su razón de ser.
-Esta bien Valentino pero yo no voy a mirar –con las manos en sus ojos Alfonsina se negó a ver-.
-¡Esto es único Alfonsina!!!, es un sueño, dentro de la bolsa hay un sueño, no te pierdas la fiesta de tener un sueño entre tus manos.
-Alfonsina sin creerlo demasiado poco a poco se fue acercando, cuando lo vio se quedó muda de tanta hermosura. Cuando pudo pronunciar palabras tartamudeando pregunto: ¿qué vamos a hacer con el?. Pienso que deberíamos quedárnoslo.
-No Alfonsina, nosotros ya tenemos nuestros propios sueños, a pesar de que aún no se hacen realidad no nos podemos quedar con algo que no es nuestro. ¿No te pusiste a pensar que alguien perdió su sueño, y por ende tal vez sus ganas de vivir?.
-Es verdad, es tanta mi emoción que sólo pensé en mí. ¿Pero cómo saber de quién es?.
-Esa será una tarea difícil, propongo dejarlo donde estaba y regresar mañana.
-Me parece muy buena idea Valentino. Mañana si todavía está ahí tomamos una decisión.

Esa noche no pudieron dormir por la ansiedad, al otro día estaban antes de que saliera el sol junto al árbol.
El sueño continuaba ahí, perfecto, intacto, inmóvil. Los dos niños se miraron en silencio por un rato hasta que Valentino dijo:

-Ya sé lo que vamos a hacer, nosotros no nos podemos quedar con el, no nos pertenece, además ya tenemos algunos sueños cumplidos y otros por realizar, mejor se lo regalamos a alguien.
-¿A quién?. Yo no conozco a alguien que necesite tanto de un sueño.

En ese instante Valentino se acordó de Zezé, un chico que había conocido el dolor antes que aprender a leer, y la vida se había encargado de hacerlo grande antes de tiempo.

-Alfonsina ¿te acuerdas de Zezé?, ¿el chico de los pies descalzos?, ¿aquel que se negó a jugar con nosotros por falta de ilusiones?.
-Si, lo recuerdo perfectamente, pero hace mucho que no lo vemos, ¿dónde vivirá?.
-Es cuestión de preguntar, a Zezé mucha gente lo conoce.

Después de varios días de búsqueda, preguntando a la gente en la calle, encontraron la casa de Zezé.
Sin hacer mucho ruido se acercaron a la puerta y dejaron el sueño con una nota que decía: Zezé ojalá nunca dejes de creer, vuelvas a ser el niño que perdiste, un adulto solidario, y un anciano que en sus últimos días tenga ganas de hacerlo todo de nuevo otra vez.

Hoy

Hoy no quiero salir, afuera todo se sigue partiendo en dos. Hoy me quedo en mi lugar encantado junto con mis duendes, tal vez uno de ellos me susurre lo que siempre quise escribir, y nunca pude por no encontrar las palabras.
Hoy necesito un instante egoísta, un ratito para mí, puedo correr el riesgo de que la nostalgia se instale en mis cuatro paredes, pero aún así pienso gozarla y sacar lo mejor de ella.
Esta noche voy a quedar en deuda con la luna, hoy mis suspiro viajarán en otra dirección aunque no lleguen a destino. Seguro una estrella fugaz hoy le encenderá una ilusión a alguien en la calle, y llegará a su casa con ganas de soñar un rato.
Hoy mi guardarropas tendrá colgado algo diferente: mi par de alas que aún no realizan su mejor vuelo.
Hoy no necesito más zapatos que mis pies descalzos esperando dejar sus mejores huellas en el suelo, y en la vida de alguien.
Hoy quiero aprovechar éste silencio para hacer un pacto con el destino, seguro hacemos un buen trato, y yo vuelva a creer en el.
Hoy quiero mirar al pasado y sonreírle, aunque no se lo merezca.
Hoy me gustaría que me partieran el corazón para sentirme más viva que nunca, y ser feliz juntando los pedacitos.
Hoy me gustaría que la valentía sea más que una apariencia.
Hoy me gustaría encontrar eso que nunca tuve, y a pesar de no saber bien de que se trata lo echo de menos.
Hoy voy a intentar reírme mucho y sin motivos, porque para hacer cosas locas sólo hay que ver la vida de una óptica que valga la pena.
Hoy quiero que el amanecer me encuentre despierta, para sentir que el mañana es mío hoy.

Tal vez

Tal vez…
El final del cuento que tanto nos atrapó no tenga el final que esperamos, pero aún así palabra por palabra, y con algo de miedo continuamos con la historia.

Tal vez…
Tu rompecabezas nunca encuentre las piezas que le faltan, pero lo importante es ver las imágenes que ya has formado.

Tal vez…
A tu amanecer le falte un suspiro, pero no dejes de encuerar tu alma cada vez que una emoción intente atravesar tu piel.

Tal vez…
Un impulso sea el camino a un regalo, no dejes que la cordura te impida averiguarlo.

Tal vez…
“Las cuerdas rotas” de una guitarra no te dejen terminar la melodía, pero seguro guarda una hermosa canción, como el mensaje que nos regaló un ser lleno de luz.

Tal vez…
El dolor no te deja ver que la tristeza es pasajera, y que grandes cosas pueden salir de una pena.

Tal vez…
La respuesta que necesitas no está en las palabras, sino en el silencio y la mirada de alguien.

Tal vez...
Aún no llega el verdadero amor, no lo dejes de esperar, y estar puntual a la fiesta de su encuentro.

Tal vez

Con la llegada del otoño se instale la nostalgia, pero no dejes de disfrutarla porque también puede darte felicidad de un color que no imaginabas.

Tal vez…
Dios te defraudó, pero siempre habrá una razón para juntar tus manos y volver a creer.

Tal vez…
La vida no sea como la soñabas, pero seguro en ella hay cosas maravillosas, de esas que no esperabas.

Valentino y Alfonsina



Alfonsina vio que Valentino estaba raro y se acercó a preguntar:

-¿Valentino que pasa?. ¿Te sentís bien?.
-Me siento extraño, tengo dentro de mí un sentimiento que no me gusta.
-¿Me puedo sentar y me contás?.
-Gracias Alfonsina, aunque te quedes conmigo y no me digas nada, necesito tu compañía. A veces el silencio consuela más que las palabras más dulces.
-Acá me quedo hasta que decidas contarme, o no me quieras decir nada.
-Tengo miedo Alfonsina.
-¿Miedo de qué?. ¿De quién?.
-Le tengo miedo a la vida.
-¿A la vida?. Pero si tus ojos Valentino brillan de tanta paz y alegría que brota de tu interior.
-Tengo miedo de hacerme grande.
-Pero eso es inevitable, los dos vamos a cambiar.
-Eso es lo que no quiero, yo sé que voy a crecer, pero no quiero ser grande, porque cuando deje de ver la vida como la veo yo, en ese momento habré perdido las ilusiones, los sueños no tendrán valor, y lamentablemente me habré convertido en un adulto.

Cartas. Cartas. Cartas.



Hace unos días mi gran amiga Martha (Martu le digo sólo yo de cariño) me agradeció por algo que a mí me gusta hacer: escribir cartas. Ella me dijo que casi nadie hace eso hoy, y que era muy importante compartir algo tan maravilloso como enviar en un papel escrito de puño y letra pedacitos de tu vida, sentimientos, emociones, la nostalgia provocada por la distancia, pero esa misma distancia te da la oportunidad de sentir mariposas en la panza cuando a tu puerta llega un sobre que contiene algo más que un papel.
Es tan grande el poder que puede tener una carta, que al momento de escribirla descubrís cosas que tal vez no sabías que tenías, o que se podían hacer, y al momento de recibirlas te sentís la persona más especial del planeta.
Una carta puede guardar algo más que palabras, yo aprendí a escribir suspiros y que lleguen a destino intactos, sin perder el sonido y la ternura del instante en que los liberó mi alma.

Un ejemplo de lo que puede significar una carta, es éste texto extraído del libro "Cartas a Nicolás" del escritor y maestro Uruguayo Ramón Igarzábal.



Nicolás:

Cartas. Cartas.
Cartas para contarle al mundo que alguien quiere querer y no lo dejan.
Cartas para los que miran las nubes buscando su patria.
Cartas para los que esperan que el mar les traiga lo que les ha llevado la tierra.
Cartas para los que saben porque están tristes.
Cartas para los que luchan para ser felices.
Cartas que sólo digan: mi corazón es tu tierra prometida.
Cartas para los que no esperan ninguna.
Cartas sin dirección ni remitente para caer de pronto sobre la plaza sitiada por la ciudad inmensa.
Cartas arrastradas por los vientos de primavera hacia donde los hombres preparan sus tierras para el trigo.
Cartas en todos los idiomas cayendo sobre el mundo con la lentitud de las gaviotas en el estuario.
Cartas para despertar al soldado que duerme en la trinchera y decirle: N
o mates inocentes porque matas tu inocencia.
Cartas que busquen la buena luz del sol junto con las palomas de los bulevares y los niños que venden diarios.
Cartas heridas de ternura que irrumpan con una música de lluvia en los paneles de controles.
Cartas que, como los caracoles marinos, tengan una música circular y eterna.
Cartas. Cartas. Cartas.
Aunque las lean y las olviden.

Cartas. Cartas. Cartas.


Martu: el post y la carta a Nicolás son para vos, es mi forma de agradecerte por no dejar que algo tan mágico como escribir una carta se pierda, y que ni el tiempo, ni la tecnología mate una acto tan sublime de convertir un papel en blanco en arte.

La niña de las hojas y lápices



Todas las tardes y a la misma hora pasaba por aquel lugar. Si bien no tenía aspecto de ser una niña de la calle, se notaba que en su vida había mucha carencia. Dueña de unos hermosísimos ojos negros, de una mirada que te regalaba imágenes, y derretía al corazón más duro. Así hacía su camino, sin darse cuenta de la ternura tan grande que inspiraba.
A veces llegaba sola, pero había días que la acompañaba alguien más pequeño que ella, le apretaba la mano con tanta fuerza, cuidaba tanto de ese ser que ni el mismo destino se hubiera atrevido a separarlas, yo creo que era su hermanita, tenía que serlo, sus ojos me lo decían.
Nada detenía su marcha: lluvia, viento, sol, frío, siempre estaba ahí, y yo esperaba puntual en la ventana para disfrutar la fiesta de su encuentro. Ella tenía para mí una sonrisa, yo le regalaba unas palabras que el cristal impedía que las escuchara.
Siempre se repetía la misma situación, hasta que mi curiosidad me llevó a ese lugar y pregunté: ¿qué es lo que busca esa niña que se acaba de ir y siempre viene por acá?, y una chica muy emocionada respondió: sólo busca algo tan simple y tan grande como hojas y lápices, esa niña sólo quiere estudiar.

Un día de furia



Cuando todo está en orden. Los días pasan en perfecta armonía. La calma reina. La nostalgia no pintó de gris tus atardeceres. Tus sueños te impulsan cada vez más. Ves al mundo a tu manera y no como está. Ni la lluvia empaña tus cristales, ni las palabras con cierto tono de malicia hacen ruido en tus oídos. Te parece increíble después de lo que pasaste estar tan bien contigo mismo.
Pero como todo acaba, todo empieza, algo o alguien llega para derribar el castillo de naipes, ese que te costó mucho levantar. Los fantasmas atraviesan tu interior como lo hacen con las paredes. Los miedos juegan a su antojo con tus emociones, y es ahí que el egoísmo se apodera de tus palabras, pensamientos, y la furia te hace ver y decir cosas que en el fondo no sientes, y no son mas que un desesperado intento de desahogo.
Llegas a pensar que nada te pertenece, las ausencias pueden más que las presencias, y no ves a los seres y las cosas que son, que si están, que si se quedarán.
Pero como toda acaba, todo empieza, la noche pasará, el sol brillará otra vez, y la vida te dará suficientes motivos para creer que la nada no existe, y que algo –en pequeña o gran medida- es tuyo y si te pertenece.

El viaje de Antonio.

Te fuiste una noche, tomaste un vuelo con pasaje de ida a la luna y no me llevaste. Te vi partir con tu aspecto cansado, con unas alas que en la tierra pesaban demasiado y querían otro cielo. Cruzaste la línea buscando algo de paz, alguien te ofreció un trato justo y lo tomaste, creo que necesitaban a seres especiales por eso te llamaron.
Al marcharte dejaste algunas deudas: el abrigo de un abrazo; consuelo para los días de miedo; tu mano para ayudarme a escribir mi historia; la luz de tus ojos verdes; tu arte para ayudar a mis musas; un cuento sin final; una pared sin pintar; un sitio sin visitar; un camino sin huellas que seguir;
respuestas a mis preguntas; y un manual para entender tu viaje.
Ahora se que estás en un lugar mejor, ahí el arco iris no sale después de la lluvia porque siempre está, todo es una gran obra de arte llena de colores. El tiempo no existe. La música no para. Los seres miran con el alma. Las flores son eternas. Las golondrinas no se van porque siempre es primavera. Los sueños no existen porque todo es realidad.
Ahí seguro vive el fauno de un cuento fascinante, y su autora es el ángel que me enviaste para ser mi cómplice en el camino.
Yo sé que estás muy bien porque ahí si vale la pena conocer la eternidad, perdona mi egoísmo si de vez en cuando te regalo una lágrima, pero ser un simple mortal y vivir en éste mundo me hace pensar que a veces Dios se equivoca.
Yo no sé que pasará con mi vida mañana, pero si sé que uno de estos días nos vamos a sentar juntos en el menguante de la luna para ver el sol llegar.


Un blog increíble.


Los que tan amablemente leen mi blog desde que nació, saben de las cosas que me gustan, y mucho más mis amigos que conocen en lo que me inspiro, lo que me identifica y me apasiona. La música es una de ellas, y con mis manos torpes y temblorosas intento que de mi guitarra salgan notas que hablen de algo, que sean mis cómplices a la hora de atrapar musas, aunque la inspiración a veces no aparezca, yo hago el intento de llegar a la creación.
Si hay alguien que me invita a soñar, a robarme historias, me transporta a cada lugar que menciona en sus canciones, ese es el gran Ismael Serrano, y hoy buscando información sobre algo que quería leer, me encontré con la enorme sorpresa de que éste cantautor tiene un blog. Ismael tiene un rinconcito como el tuyo, como el mío, donde dejamos trocitos de nuestras vivencias, esas historias donde disfrazamos al protagonista para ocultar que somos nosotros, compartir momentos inolvidables, dejar algo de nuestro corazón con parches, y nuestra alma en cueros.
Un lugar soñado es el nombre del blog, todavía no caigo, pero mientras alguien me quita la ilusión, o me dice que es un sueño hecho realidad, yo pienso seguir disfrutando de sus letras a través de su música, y ahora también de lo que no dice cantando.

90 y 10

Existe un lugar sin dirección, no todos pueden ver el camino para llegar, y no es tan fácil de encontrar. Allí todo es complicidad, confianza, amistad, y amor, ese espacio mágico que es inalcanzable para mucho se llama 90 y 10.
No es un bar pero sirve para desahogar las penas. No es canción pero yo lo uso como inspiración. No es una nave espacial pero es mi motor. No es un libro pero cuantas historias yo pude leer ahí. No está en la tierra pero es mi árbol azul, y sus raíces el mejor cimiento para hacer de el mi refugio. No sopla viento pero impulsa mis alas. No está cerca de mí pero nos vemos a diario. No es una obra de arte pero le sobran colores. No se puede explicar pero tiene muchas razones.
Es tan grande y especial que me duele pensar que puedo perderlo. No sabía que existía y siempre lo eché de menos. Me costó muchos años encontrarlo, ahora quiero que sea eterno. Me salva la vida pero también me mata del miedo. No es un hogar pero me hace sentir como en casa. No hay paredes que atravesar pero los fantasmas siempre están, esos molestan y mucho porque a veces no te permiten disfrutar. No es mío pero lo siento de mi propiedad, ahí conocí mi lado egoísta, lo asumo pero no lo puedo evitar.
El 90 y 10 tiene tanta sinceridad, el 90 es una gran verdad, y el 10 un tremendo disfraz.

Valentino y Alfonsina




Alfonsina se despertó con muchas ganas de hacer cosas, de repente soltó una expresión muy espontánea.
-¡Vamos a pintar!.
Valentino algo sorprendido respondió:
-¿Pintar qué?.
-Podemos darle forma y color a las cosas hermosas.
-Está bien, me gusta tu idea, pero no te olvides que además de cosas hermosas, hay sentimientos hermosos. ¿Cómo pintar eso?.
-Mira Valentino, yo una vez vi suspiros plasmados en una carta, si alguien pudo escribir suspiros, yo puedo pintar algo puro y hermoso, no sé que pueda ser…¡ya sé!. ¡Tu alma!.
-¿Mi alma?. ¿Cómo harías eso?.
-No sé que forma le daría, ni los colores que usaría, pero voy a pintar tu alma para que se la pueda ver aún con los ojos cerrados.

Parches para el corazón

En tiempos difíciles las cosas no salen como las soñamos; pierdes batallas; los sueños dan un paso al costado; todo duele y hasta respirar pesa. Las mañanas son iguales, nos despertamos con la esperanza de que algo va a cambiar y nada pasa.
La vida ya no se ve con aquellos ojos de niños, y no encontramos el manual para entenderla.
Yo no conozco la fórmula de la felicidad, pero si sé que el dolor no me va a quitar lo mejor que pueda tomar de cada cosa, y también que los parches para el corazón te pueden rescatar. Un abrazo no soluciona tus problemas pero puede ser un buen refugio.
Un detalle no quitará tus penas pero puede hacer que tu alma se desahogue con un suspiro. Una palabra tierna y a tiempo te puede decir lo especial que eres. Una llamada a última hora del día te dirá que no estás solo. Alguien con una nariz roja puede ser el culpable de robarte muchas sonrisas.
Deja que te cuiden aunque sea en silencio; que alguien vele tu sueño; que te miren a los ojos y no te hagan preguntas, y si las hacen dile que no puedes solo.
Seguramente las heridas no sanarán mañana pero deja que las curitas hagan su trabajo, que los parches cubran un ratito el dolor, respira profundo, y dale una tregua a tu interior.


Todo...Casi todo

Todo…

Te dejo mis pasos, mis pies descalzos y fríos,
aunque sus huellas valgan nada y no indiquen el camino.

Todo…

Mi verdad, mis tres virtudes y media,
y mi nostalgia al despertar.

Todo…

Aunque no sepa como dar,
pero si he de renunciar, te dejo la parte de cielo que me toca,
mi nube con forma de alma, y los latidos que me sobran.

Todo…

Lo que siempre quise ser,
mi disfraz de valiente, la fe que digo no tener,
y los sueños que me robé.

Todo…

Las palabras que no se decir, los versos que perdí
y fueron a parar en una carta.
Mi boceto de felicidad,
y la suficiente locura para creer que puede ser eterna.

Todo…

Silencios que se entiendan con sólo una mirada.
Mi cicatriz en el hombro, y esas que están pero no se ven,
las ocultan mi piel y llegan hasta el fondo.

Todo…

La libertad de mi ala izquierda, la otra hace mucho la llevas amarrada a tu vuelo.
Las líneas de mi mano, no se lo que dicen pero hablan de caricias.

Todo...

Te dejo todo…casi todo.
El mejor de mis males…tu ausencia,
esa es egoísta y mía, sólo mía.

Mi guitarra y una canción


Mis dedos se deslizan acariciando las cuerdas de mi guitarra, me aferro a ella intentando recuperar los abrazos que nunca di, y soñando con esos que quiero dar.
El sonido de una nota desafinada pasa desapercibida al confundirse con la lluvia que susurra algo en mi ventana, yo no entiendo lo que dice, pero veo que en el cristal me ha dibujado una lágrima.
Tal vez es tiempo de recordar hasta agotar la memoria; escribir una historia sabiendo el final sin conocer su comienzo; encontrar lo que nunca busqué; y dejar atrás lo que no es para mí.
La lluvia continua, y mis dedos no dejan de buscar la melodía que pueda vestir unos versos de canción, inspirados por nadie pero que hablen de todo; que cuenten de mí, pero que disfracen mi alma; palabras que hablen de mi lugar encantado sin revelar el camino; de las cosas que me gustan, pero no las que sueño, tengo miedo de que alguien mientras duermo me robe algún duende…esos que te ayudan a alcanzarlos.
El viento trae consigo las últimas ráfagas de frío de este invierno; también algo de nostalgia; y algunas musas que fueron a dar al pie de mi ventana, tal vez alguien las dejó escapar al suspirar, y me las regaló sin conocerme, y sin saber que viajarían hasta mi guitarra para darle vida a mi mejor canción.

No es necesario ver para mirar


Todas las mañanas cuando voy a mi trabajo se repite el mismo episodio: el anciano con la mirada entre sombras, y la chica con sus libros, de mirada soñadora.
El anciano con aspecto cansado, aferrado a su bastón color marrón que son sus ojos, y lo ayuda a encontrar el camino. La chica de paso sereno apura su marcha cuando ve que él llega, en ese momento se produce el rutinario encuentro.

Como a mi me gusta robarme historias, imaginar diálogos, estos personajes sin saber le regalan un instante tierno a mi alma, y alas a mi imaginación. A pesar de estar a unos metros parece que los escucho…

-Señor buen día. ¿Va al mismo lugar de siempre?.
-Señorita que gusto encontrarla, si voy al viejo almacén como todos los días, mi desayuno depende de cuanto demore en llegar allí.
-¿Me permite ayudarlo?.
-Claro, el poco orgullo que me queda no me permitía pedírselo.
-No se preocupe para mí es un placer, además no tiene que sentir pena ya nos conocemos, somos amigos de la vida, esos que no tienen identidad, pero por algo se encuentran.
-Tiene razón.
-¿Entonces que dice?. ¿Me da su brazo?.
-Con mucho gusto. ¿Se imagina?. Voy a ser la envida de todos, ir del brazo de una hermosa niña.
-Gracias, pero no soy hermosa.
-Si lo es, no necesito verla para mirar su interior, y créame hace tiempo no percibo un ser tan maravilloso.
-Gracias. ¿De que se ríe?.
-De sus mejillas. ¿Están rojas verdad?.
-Si, es que sus palabras fueron muy lindas, y no creo merecerlas.
-No sienta pena, sólo dije la verdad.
-Ya llegamos.
-Que rápido, creo que me estoy malacostumbrando a su agradable compañía.
-Mañana si el reloj quiere acá nos vamos a encontrar.
-Gracias señorita.
-De nada, para mí es un placer.
-Que Dios la bendiga, y no se sienta triste, la vida tiene para usted algo maravilloso, sólo tiene que estar atenta.
-Gracias, que tenga un lindo día, y vuelva con cuidado por favor.
-Gracias a usted por ser mi ángel terrenal.
-Nos soy un ángel, no tengo alas.
-No tiene alas, pero unas manos puras, y solidarias que me hace más fácil el comienzo del día.
-Ya le dije que es un placer, me voy porque llego tarde, hasta mañana.

Después de observarlos varios días, estoy convencida que los dos se necesitan, él para llegar a tiempo a su destino, y ella para hacer un alto en el camino.

No lo conozco pero lo vi


Como todas las tardes llegó al mismo parque a sentarse en el viejo banco de siempre. No sé si espera algo que perdió, o lo que nunca tuvo, pero aún así no deja de buscar. Con la mirada cansada y el alma embalada con el celofán de la nostalgia, se entrega en las manos del destino, tal vez la vida hoy le regale una caricia, el reloj se detendrá por un ratito para darle algo de tiempo, y alguna de esas poesías plasmadas en el libro que siempre lo acompaña se hagan suyas, ojalá hoy no sea un lector, un espectador, un ladrón de historias, para convertirse en el protagonista de un momento.
Yo no lo conozco pero he visto sus ojos, su espalda me habla del cansancio provocado por el silencio, y de aquello que gritó pero el eco le devolvió una soledad más afilada, cortándole los pocos hilos que lo amarraban a una gastada esperanza. Sus manos curtidas me contaron que no estaban así por años de trabajo, esas marcas se las habían provocado el tacto con el vacío, y la impotencia de apretar los puños sin saber a que pegarle.
Al verlo comprendí que su alma era una de las más hermosas y tristes también, que su vida no había sido fácil pero aún así estaba ahí, se negaba a resignarse, ya no quería extrañar eso que nunca tuvo, quería tener motivos para vivir, o quizás morir…pero por alguien, no pedía una eternidad, sólo se conformaba con un tiempo, horas, días, meses, ya ni siquiera soñaba con decir años, pero si quería llegar puntal a la fiesta de unos ojos que le regalen un pequeña y fugaz felicidad.

La noche de la nostalgia


“Amiga nostalgia, nunca digas que me has visto llorar por eso que nunca fue, por los momentos que dejé pasar, y todos esos que disfruté”

-Vane-


Desde el año 1998 en Uruguay se celebra la noche de la nostalgia, hoy éste evento masivo cumple 10 años. En cada rinconcito de mi pequeño gran país hoy se escucha música de la década del 60, 70, 80, y algo de la del 90, todos salen a bailar, hoy es la excusa perfecta, no importa la edad que tengas, hoy encontrás tu lugar para recordar, bailar, suspirar y decir…ay que tiempos aquellos!. Hoy nadie te va a decir que hacés el ridículo vestido en blanco y negro, que sos un viejo por tus gustos musicales, que te quedes en casa que hace frío. Hoy los adolescentes dejan su lugar, no busquen a Shakira, Ricky Martin, hoy nadie los conoce. Hoy se apoderan de la pista Los Beatles, Abba, Bee Gees, Bob Dylan, Rolling Stone, Bob Marley, Queen, The Police, Madonna, Phil Collins, Michael Jackson, U2, Elton Jhon, y tantos otros que es imposible nombrar, como aquellas legendarias bandas Argentinas que hicieron grande al Rock de ese país, y que en Uruguay adoptamos como propias, y se convirtieron en himnos.
Hoy las décadas, razas, idiomas se mezclan, todos giran al ritmo del viejo y querido disco de vinilo.
Mi vieja volverá a suspirar por su querido “Palito” Ortega, y mi viejo desde allá arriba se volverá a poner celoso al escucharla tararear alguna de sus canciones.
Hoy señores se parte el país, y todos salimos a reventar la noche –expresión muy nuestra-. Ustedes se preguntarán…¿Cómo hacen estos locos para amanecer recordando y bailando si mañana es lunes y hay que cumplir con las obligaciones?. ¡Tranquilos! el 25 de agosto celebramos el día de nuestra independencia y por ende es feriado, y todos nos podemos quedar en la cama un rato más.
Así que entre nostalgias y suspiros gritaremos…somos libres! y esperaremos a que nos sorprenda el sol.

No importa que no seas Uruguayo, te invitó a desempolvar el tocadiscos, y que éste 24 de agosto celebres con nosotros la noche de la nostalgia.

-Pequeña anécdota-


Corría la década del 80, año en que se me dio por nacer –bueno a mis padres traerme-, y mis hermanos que para ese entonces andaban todos alborotados, me hicieron fan de esa música. Con apenas casi 6 años los dejé a todos de boca abierta cuando me preguntaron: ¿Vane que querés de regalo de cumpleaños? Y yo respondí…el cassette de Whitney Houston!!!
Para terminar les dejo el video de la canción que para ese entonces me hacía bailar sin parar, y si se convirtió en mi tan deseado regalo de cumpleaños.



-Whitney Houston-
"I wanna dance with somebody"


Creación e inspiración




La creación y la inspiración van de la mano. No se puede crear sin inspiración, y una obra sin motivos se vuelve fría.
No todos vemos las cosas con la misma óptica. Algunos son ambiciosos a la hora de buscar inspiración. Yo no necesito ir a París para imaginarme una gran historia de amor. Que me perdone Picasso, pero nadie pinta cómo Mateo (mi ahijado).

Las tímidas cuerdas de mi guitarra se transforman cuando reconocen las primeras notas de una canción de Soraya. Para mí un día gris es un hermoso día, hasta puedo dibujar un arco iris en blanco y negro bajo la lluvia, y escribir los versos más tristes, o un cuento con final feliz.
Sólo tengo que contemplar una pequeña planta de naranja-lima, para imaginar el rostro del personaje más tierno que conocí.
No puedo tocar el cielo, pero sé que se siente algo parecido cuando alguien te roba un suspiro. Cuando quiero soñar llamo a mis duendes, Valentino y Alfonsina, ellos si van a llegar, y me van a llevar de la mano.
Unas páginas sueltas y de colores me hicieron conocer un mundo lleno de magia, y desde entonces “
La chica de las estrellas fugaces” se convirtió en mi lugar encantado; acá vuelco momentos de inspiración, yo no sé si llego a una gran creación pero lo intento, juego, me atrevo, sueño, lloro, y hago lo que siempre quise hacer…escribir.

La música es indispensable para mí, y si hablo de creación e inspiración esta canción de letra sencilla, hermosa y mágica tiene estos dos elementos, y su cantautora alguien que yo admiro mucho.
Si Rosana me permite me gustaría regalar otra vez esta canción…Martu: gracias por la magia, y por creer en mí siempre.


-Rosana-
"Magia"







Es el agua, es el viento,
es resumen de todo lo que siento,
es la arena, es el sentimiento,
es la tinta que no borra en el silencio,
es el aire de puntillas,
es la calma cogiendo carrerilla,
es el sabor de lo pequeño,
es tocar un sueño...
Es el mapa de un suspiro,
es lo que hay cuando te miro.
Es el duende del latido de tu corazón...

Magia es probar a volcar,
lo que hay en el fondo de ti,
magia es verte sonreír...
Magia es probar a saltar sin mirar,
es caer y volver a empezar...

Es el tiempo, es la hoguera,
es la mano que mece la marea,
es la tierra, es la bandera blanca,
es la gota de una lluvia de esperanza...
Es el mundo de puntillas,
es la vida cogiendo carrerilla,
es el sabor de lo pequeño... Es tocar un sueño...
Es el mapa de un suspiro,
es lo que hay cuando te miro,
es el duende del latido de tu corazón...

Magia es probar a volcar,
lo que hay en el fondo de ti,
magia es verte sonreír...
Magia es probar a saltar sin mirar,
es caer y volver a empezar...

Es el mapa de un suspiro,
es lo que hay cuando te miro,
es el duende del latido de tu corazón y el mío...
Es la meta y el camino,
es la suerte y el destino,
es la fuerza del latido de tu corazón...

Magia es probar...
Es el agua, es el viento,
es resumen de todo lo que siento,
es la arena, es el sentimiento,
es la tinta que no borra en el silencio...

Valentino y Alfonsina

Sentados en la vereda estaban Valentino y Alfonsina.
Valentino puede ser un adulto que se niega a ser grande. Alfonsina una niña atrapada en el cuerpo de una anciano. Cómo no existen pueden ser y llegar a donde quieran. Tal vez se conviertan en los protagonistas de un cuento, y logren eso que yo siempre quise: cambiar el mundo. Tal vez digan lo que yo siempre he callado. Son más libres que un par de alas en pleno vuelo, pero también presos de nostálgicas palabras. Tan invisibles cómo para llegar a lugares que nunca iré. Tan inocente y humanos para tener ganas de morirse mañana.
Cuando quieren salir de ese lugar encantado para formar parte de un momento, se apoderan de mi imaginación para existir a través de mis palabras.


Valentino suspiró y dijo en voz alta.
- Me gustaría ser eterno.
Alfonsina con una espontánea preocupación –sin gustarle mucho la idea- salió al cruce de ese deseo.
-Ay no! sería espantoso vivir para siempre. ¿De dónde sacarías las ganas y el valor para querer quedarte en esta vida?
- Tranquila Alfonsina, yo no mencioné vivir para siempre, sólo quise ser eterno.

Post a pedido

Este post es a pedido de Nuri y su blog http://nurimoon.blogspot.com/ Ella me hizo algunas preguntas porque quiere saber cosas de mí.
Acá voy Nuri!!!

- Seis cosas que me hacen feliz-

1- Las charlas interminables, esas que te alegran el día.
2- Tocar la guitarra.
3- Ir al cine (puedo ir todos los días, es más una vez fui dos veces a ver la misma película).
4- Los domingos con mis hermanos (ay Dios esos niños grandes son geniales!!!).
5- Escribir.
6- Andar en moto (uy que aventura!!!).
Y muchas cosas más, si son simples mejor, pero cómo sólo me pidieron seis. Puedo poner una séptima? porfis no sean malas!!! Muero por el dulce de lecheeeeee!!!!!!!!

- Cinco canciones que me alegran la vida-

1- "Yo te seguiré" de Alberto Plaza (es la canción de mi vida).
2- "Grande" de Paolo Valesi y Alejandro Sanz (porque siento que así soy yo)
3- "Casandra" de Ismael Serrano (porque la letra realmente me alegra el día)
4- "Magia" de Rosana (una gran canción que habla de las cosas sencillas)
5- "Espejo" y "A tu lado" de Soraya (adoro a Soraya ¿No puedo nombrar todas sus canciones acá?).
Acá voy a romper las reglas, total a mí no me dieron ningún premio así que voy a poner más canciones, jajajajajaja que patotera!!! (expresión Uruguaya...¿la conocés no Martu?).
No puedo dejar afuera a Laura Pausini, Ricardo Montaner, Joaquín Sabina, Fito Páez, muchas canciones que son clásicos de los 80 en inglés (Aunque no fui de esa época...che! no me creen?, tengo 28 años jajajaja) en fin...creo que tendría que hacer un post aparte con todo eso.

Bueno estimada Nuri, espero haber cumplido con tu pedido, fue un placer hacerlo, un abrazo, y gracias por estar siempre en mi rinconcito loco y azul.

Hoy



Hoy me tropecé con algo que sentía perdido, hoy me caí en los brazos de la vida, y decidí renacer desde las heridas.

El cielo al revés




Hoy la vi, estaba hermosa cómo siempre, tan orgullosa, pero esta vez no tuve que levantar la mirada para verla, ahora tuve que mirar hacia abajo, y la luna estaba ahí para mí. Después de la lluvia, en la calle se formó un gran charco, parecía que alguien me había volteado el cielo sólo para regalármelo, y lo único que tuve que hacer fue estirar la mano para tocarlo, pude contar las estrellas, y ver mi rostro junto con ellas.
Noté a la luna algo inquieta, tal vez sintió temor que yo pudiera observar ese lado que tanto oculta, y que no todos pueden ver, ella se lo muestra a los que la enamoran, tal vez un lobo de alma solitaria, y poeta, con sus serenatas disfrazadas de aullidos logre convencerla.
En ese lago inventado me dejé llevar, anclé mis ojos allí, y sólo dejé que se me escapara la imaginación y que llegara lejos, donde nada ni nadie la amarrare, para que me cuente de eso que aún no alcanzo, de esa canción que algún día mi guitarra y yo vamos a componer, de ese lugar en el mapa que muero por conocer, de los abrazos que van a llenar mis brazos vacíos, de una carita que me va a regalar una mirada pasmada, llena de amor y emoción.
La noche aún no acaba, y yo sigo en mi naufragio, es que no quiero llegar a la orilla ni que nadie me rescate, tal vez alguien que me acompañe en silencio, me hable con suspiros, que quiera alcanzar con su imaginación a la mía, soñar despiertos, y no le importe que la magia dure un instante, que todo termine al llegar el día, y aún así quiera quedarse, y perderse en ese pedacito de agua y de cielo conmigo.

Relato





Diego no conocía la mar. El padre, Santiago Kovadloff, lo llevó a descubrirla. Viajaron al sur.
Ella, la mar, estaba más allá de los altos médanos, esperando. Cuando el niño y su padre alcanzaron por fin aquellas cumbres de arena, después de mucho caminar, la mar estalló ante sus ojos. Y fue tanta la inmensidad de la mar, y tanto su fulgor, que el niño quedó mudo de hermosura. Y cuando por fin consiguió hablar, temblando, tartamudeando, pidió a su padre:

-¡Ayudame a mirar!-


Relato extraído de “El libro de los abrazos”
Eduardo Galeano. ¡Que orgullo que seas Uruguayo, porque sos un grande!!!


Valentino y Alfonsina

Alfonsina pregunto: ¿Por qué duele tanto la vida?.¿Por qué cada vez me cuesta más respirar?. ¿Por qué mis días se terminan antes?. ¿Por qué a mis sueños los alcanzan otros?. ¿Por qué todo pasa de largo y nada se queda?. ¿Por qué cambian las estaciones y no traen nada nuevo?. Para qué extrañar tanto a alguien, si ya no piensa en tu existencia?. ¿Qué tengo para dar y le pueda servir a alguien?




Y Valentino salió a su encuentro, aunque las preguntas no fueron formuladas para el, respondió…
No tengo todas las respuestas, es más, no me creo capaz de intentar siquiera responderlas. Pero si vieras lo que hay en tus ojos, ese brillo que ilumina todo cada vez que te miro, tus interrogantes no tendrían razón de ser, se curarían tus heridas, y entenderías la importancia de un nuevo amanecer.


Volví!!! ¿Ya era hora no?

Nada es para siempre, las cosas buenas a veces duran poco, y las malas se quedan un tiempo más, de nosotros depende que lo mejor de la vida sea eterno, luchar porque no se escape, gozar los instantes para saborearlos en el futuro, y que te sigan llenado el corazón cada vez que los revivas. Yo siempre dije…las cosas que duelen vienen solas, y a la felicidad hay que buscarla, y si no está a la vuelta de la esquina, seguro la encontrarás en unos ojos que te miran sin motivos; en una sonrisa que te sorprende, y le roba un gesto a tu cara casi sin quererlo; un abrazo sin pedirte nada a cambio; ver cuanto le importás a la gente que amas; contemplar una noche estrellada, aunque la luna ni se entere que te estás inspirando en ella; dejar que la lluvia te roce la cara, y que sus gotitas le curen las heridas a tu alma; disfrutar de largas charlas, profundas y tontas, no importa de que se hable, lo que realmente importa es el ser maravilloso que te acompaña, que te espanta las soledad, y con sus palabras te llena de calma.
Son tantas cosas las que te gritan que veas la mitad del vaso que está llena y no la vacía, tal vez por tratar de llenarlo te perdés de lo que está a tu alcance, y no lo ves por no saber mirar, y no lo sentís por no saber escuchar, y no los tocás por no estirar tu mano.
Yo aprendí a disfrutar de las pequeñas felicidades, así que no estoy dispuesta a cambiar mi forma de ver las cosas, de mí depende no hacerme grande, y mirar todo desde la mejor perspectiva, y seguir buscándole el lado bueno a las cosas, aunque no parezca si lo tiene, porque si sufro por algo, ese dolor me hará un poco más fuerte.

Estoy de vuelta, y hoy más que nunca me aferro a unas palabras que le regalé a una persona que amo mucho… Nunca termines de empezar, porque empezando un nuevo día, un proyecto, un trabajo, una idea, un camino, un cambio, una ilusión, un sueño, es demostrarle a la vida el respeto que se tiene por ella, y que a pesar de todo siempre vale la pena vivirla intensamente.

Sin título

Éste pequeño post es para comunicarles algo a todo ustedes que siempre me visitan, a pesar de que mi blog tiene 4 meses de vida, es mucho lo que me ha dado hasta ahora, ha llegado gente que me permitió conocer blogs increíbles, con algunos me identifiqué mucho, y estoy muy agradecida por eso.

En éste momento estoy pasando por un problema de salud, no es grave, pero me llevó a sufrir de estrés, es por eso que necesito tomarme un tiempo, unas pequeñas vacaciones. Sólo les pido que cuiden mi blog, que no lo olviden, en cuanto regrese yo les aviso. Voy a estar en contacto cómo siempre con todos mis compañeros blogueros, leer sus rinconcitos me ayuda mucho, así que no se van a deshacer de mi tan fácilmente.
Sólo es un tiempo, hasta que la inspiración aparezca, mi blog se merece que le dedique toda mi atención, esa que hoy no tengo.

Sigan escribiendo cómo hasta ahora, gracias por todo, y hasta dentro de un tiempo.
Vane

Te conocí...


Te conocí sin imaginarte,
yo esperaba el amor de mi vida,
y encontré el amor de una tarde.
Te vi sin entender, no eras mi destino,
pero tus ojos me recordaron
que uno hace planes, y la vida cambia tu camino.
Tal vez me olvidé de dar vuelta el reloj
y llegué tarde a su encuentro,
pero es tan sabio el tiempo,
yo pensé que era el final, y me regaló tu comienzo.
No tengo mucho para ofrecer,
unas manos frías, mi ala izquierda quebrada,
un alma con carencias, y nostalgia en la mirada.
No tengo mucho para pedir,
tal vez algo para siempre,
y apareciste para darme un momento,
no se si durará una eternidad,
sólo te pido que inmortalices éste encuentro.



El ser que me permitió ser

Hace tiempo que te quiero escribir, no sé si por falta de valentía, y por no querer llorarte una vez más no lo había hecho, pero hoy tengo la necesidad de hacerlo, no lo niego, estoy frente a la computadora con las manos temblorosas y un nudo en la garganta, pero aún así las palabras quieren salir, y yo me entrego a ellas para regalarte éste momento.

A pesar que ya pasó mucho tiempo, todavía tengo tan presente todos los episodios que vivimos juntos, la pasión con que hacías las cosas; el talento para crear de la nada maravillas; la paciencia para explicarme mil veces lo mismo; tu increíble solidaridad para ayudar a todo aquel que lo necesitara; y el inmenso amor por los que estaban a tu lado; ese conjunto de cosas eran muchas de las cualidades que te hacían un ser especial, y no se notaba el carácter “tano” que te heredaron tus abuelos, que es el mismo que tengo yo.
Son poquitos los recuerdos que tengo, pero los revivo a diario para no olvidarlos; irte a encontrar cuando volvías del trabajo; esa inmensa e inexplicable felicidad que me provocaba ver que me estabas esperando cuando salía de la escuela; sentarnos a contemplar las noches, y contar satélites -eso me hacías creer-; toda aquella súper producción, para que yo viviera cómo nadie la llegada de los reyes magos; todos esos recuerdos están más presente que nunca hoy.

Ay viejo!!! no quiero ponerme triste, pero te pido que me entiendas, fue difícil para mí despertarme un día y ver que te habías ido para siempre, ni siquiera me pude despedir, no me acuerdo si te abracé, si te dije que te amaba mucho. Todos los días te extraño, es que te fuiste antes de tiempo, y te llevaste contigo todos los cuentos que no pudiste leerme, los abrazos de consuelo para no sentir miedo, las cosas que no pudiste enseñarme, y algo de mi alma también te llevaste.

Ya pasaron varios años de tu partida, te cuento –aunque ya lo sabés- que estoy muy bien; mi vida está bastante organizada, aunque te confieso que a veces no puedo con ella; trato de ser una mejor persona todos los días; hay sueños que todavía no alcancé; tomo todo lo positivo, y disfruto de las pequeñas cosas y así consigo ser feliz, a las experiencias negativas le busco un lado bueno, me ayudan a crecer; sigo tan sensible cómo cuando tenía 7 años; y todos los días te recuerdo.
Me lleno de orgullo cuando mi mamá, o una persona que me cruzo en la calle me dice…sos igual a tu padre, que alegría me da saber que soy lo que vos fuiste, pero en versión femenina, ojalá pueda parecerme un poco más, y llegar a ser el gran ser humano que fuiste, un ejemplo de lucha, un padre excepcional, y alguien tan, tan especial cómo vos; yo creo que por eso te fuiste tan temprano, allá arriba te necesitaban.
Si volviera a nacer me gustaría que fueras mi padre otra vez, pero le pediría a Dios que te dejara un rato más conmigo, aunque creo que siempre estás, antes cómo papá, y desde hace algún tiempo cómo ángel de la guarda.

Donde estés –seguramente es un lugar hermoso- feliz día papá!!!

TE AMO VIEJO!!!


Mi otro yo


Hoy me desperté cómo siempre, pero esta vez no lo hice sola, alguien a los pies de mi cama me contemplaba ansioso, yo no sé si me desdoblé, o el espejo se cayó encima de mí, pero mi otro yo estaba ahí, me miraba, me examinaba, no sé si estaba feliz por ser parte de mí, o quería salir corriendo a compartir su vida con otra persona.
Después de unos minutos sin entender si eso era un ataque de locura, o parte de un sueño, me sedujo la idea de verme cómo me ven los demás, así que me sacudí el impacto, y me dediqué a espiar, seguir, y disfrutar de “eso” que se parecía mucho a mí.

Comenzamos el día a la misma hora de siempre 7:30 de la mañana, no podía entender cómo un ser “normal”, desayunara tan rápido y se conformara con tan poco, ay pobre panza a mitad de la mañana!!!, y así salimos a enfrentar un nuevo día, cumplir con las obligaciones, e intentar que la rutina no nos devore. Sólo viéndome comprendí porque a veces llegaba tarde al trabajo, o tenía que correr…claro!!! si intercambiaba palabras con los que encontraba en el camino, y la mirada se perdía en algo que atrapaba mi atención.
A pesar de que mi trabajo es estresante a veces, al verme comprendí que estoy cómoda en el, y al ser la única mujer allí me di cuenta porque me siento la reina del lugar; entre papeles, risas, algún detalle que pinta mi rostro de rojo, llevo la jornada de buen humor.
Una extraña sensación de bienestar me invadió, creo que aquel personaje tan igual a mí ya me caía bien, y me gustó encontrarme en el camino.
Volvimos a la casa para almorzar, y recuperar energías para enfrentar la recta final del día, y cumplir con lo que nos queda en el trabajo.

A la hora de la salida, y la libertad completa ya me sentía súper conmigo, me gustaba verme caminar, pensar, regalar sonrisas, robarme historias, jugar con algún niño que se diera cuenta que era un adulto sin ser grande; me sonreí al entender que siempre me sería fiel; que si me engaño es para huir un rato del mundo; que si me callo es para escuchar, y si grito es por pura desesperación; me di cuenta que no hablo sola, hablo conmigo, y lo bueno es que nadie me lleva la contra; vi tantas cosas al contemplarme.

Cuando llegó la noche vinieron con ella los balances, y el momento de enfrentarme, necesito que me escuches, no todo es color de rosa, hay cosas que no entiendo, hay cosas que no me gustan. No podés perder la paciencia tan fácilmente. No corras tanto, la vida no se termina mañana. Tenés 28 años ya es tiempo de ser más ordenada. Quiero que me expliques cómo podés ver la misma película 10 veces; que te sigas riendo tanto con las mismas historietas de Mafalda. ¿Por qué te gustan los finales tristes?. ¿Cómo podés comer kilos de dulce de leche sin empalagarte?. Tenés 108 cds…¿por qué siempre escuchas los mismos?. Ya es tiempo de no pelearte con Dios, no toda la culpa es de El por lo que pasa, nosotros los humanos somos causantes de tantas catástrofes, tanta crueldad. También es tiempo de ser más fuerte. Creer de verdad y aferrarte a eso de…la esperanza es lo último que se pierde.

Antes de irnos a dormir, o de despertarnos –porque todavía no se si esto es un sueño-, me gustaría decirte, pedirte que no pierdas esa sonrisa; ni el brillo en los ojos; esa capacidad de asombro te puede rescatar muchas veces; no dejes de ver la vida de esa manera; seguí disfrutando de los más sencillo, y de las pequeñas felicidades; si aprendés a ser fuerte, no renuncies a tu sensibilidad; no dejes de escribir; no dejes de creer que podemos tener un mundo mejor; y sobre todo no dejes de soñar.
Son tantas las cosas que te quiero decir, y hay otras que me voy a olvidar, pero ya es hora de terminar, no sé cuando tenga la necesidad de volverte a encontrar, pero estoy feliz de ser parte de ti, y de que seas parte de mí, y que juntos disfrutemos de lo complejo y hermoso que es vivir.