Tal vez…
El final del cuento que tanto nos atrapó no tenga el final que esperamos, pero aún así palabra por palabra, y con algo de miedo continuamos con la historia.

Tal vez…
Tu rompecabezas nunca encuentre las piezas que le faltan, pero lo importante es ver las imágenes que ya has formado.

Tal vez…
A tu amanecer le falte un suspiro, pero no dejes de encuerar tu alma cada vez que una emoción intente atravesar tu piel.

Tal vez…
Un impulso sea el camino a un regalo, no dejes que la cordura te impida averiguarlo.

Tal vez…
“Las cuerdas rotas” de una guitarra no te dejen terminar la melodía, pero seguro guarda una hermosa canción, como el mensaje que nos regaló un ser lleno de luz.

Tal vez…
El dolor no te deja ver que la tristeza es pasajera, y que grandes cosas pueden salir de una pena.

Tal vez…
La respuesta que necesitas no está en las palabras, sino en el silencio y la mirada de alguien.

Tal vez...
Aún no llega el verdadero amor, no lo dejes de esperar, y estar puntual a la fiesta de su encuentro.

Tal vez

Con la llegada del otoño se instale la nostalgia, pero no dejes de disfrutarla porque también puede darte felicidad de un color que no imaginabas.

Tal vez…
Dios te defraudó, pero siempre habrá una razón para juntar tus manos y volver a creer.

Tal vez…
La vida no sea como la soñabas, pero seguro en ella hay cosas maravillosas, de esas que no esperabas.