Foto: Vanessa R.
Es asumido y compartido que los días de lluvia hacen conmigo un desbarate, no sé si soy yo la que escribe o las gotitas se deslizan por el teclado, no sé si soy yo la que siente o lo inspira el día empapado. No sé quien amaneció primero, si el sol se tardó y las nubes hicieron del gris el color más brillante, un color que puede no gustar pero cuando le da por pintarlo todo a su antojo es mejor abrir los ojos, no vaya a ser que te pierdas el milagro de su pincel.
Si en tu mundo es otoño tal vez dudes antes de salir, pero como en el mío es primavera, a pies descalzos voy al ritmo de un caracol sin pausa dejando huella en el camino, tal vez alguien la encuentre y quiera irse conmigo, llegar a la casita junto al lago con chimenea y barquito de papel anclado para cuando quieras izar velas, o simplemente quedarte a esperar a que la luna se le de por eclipsar.
Mirando por el ventanal me he dado cuenta que también fueron hechos para suspirar ¿O será que el gris me salpica la nostalgia encendiendo eso que llaman extrañar?
Las nubes lejos de ser una amenaza dejan al descubierto la transparencia de los ángeles, y aunque vuelen con las alas mojadas son los guardianes de tu sombra, a pesar de que esta no se vea.
Prueba ir sin paraguas, seguramente te sorprenderán caricias que no esperabas, detrás del vinilo están las mejores creaciones, y detrás del negro viene el blanco, el blanco significa tantas cosas bonitas, y el negro también si lo miras con el traje que te pusiste para la última cita.
Con los cordones desatados y húmedos es más fácil tropezar, pero caer en un charco es sentir que se puede volver a empezar.
En el jardín bailan las margaritas, prueba deshojar una tal vez te enamore la respuesta, prueba sentarte a esperar, puede que tu zaguán sea el cálido resguardo para alguien.
Si el gris mojado de la lluvia tapizó tu día, yo miraría dos veces, tal vez hasta con los ojos cerrados una cortina de colores se asome detrás de cada gota.
6 comentarios:
A mi también me encantan los días grises, porque además de inspirar tanto, te ayudan a imaginar cosas que están fuera de tu alcance...
Tal vez puede ser posible que detrás de la niebla puedas encontrarte con el mar en pleno desierto; descubrir que los cristales de las ventanas evaporan los besos que nunca llegaron a su destino, o simplemente entre la madera húmeda y el cristal frío se encuentra un trampolín oculto desde donde se lanzan los suspiros y buenos deseos, además de dar la bienvenida a las letras que buscan abrigo entre la tinta y las hojas de papel.
Creo que no importa si es verano o invierno; pues en los días grises brillan con más ganas las cartas sin tiempo y el reflejo de las botellas que esperan que llegue el día en que puedan ser lanzadas con un mensaje al fondo del mar. También surgen los cuentos y las historias que te llegan a envolver con su magia (claro está, si tú decides que revivan bajo la mirada de alguien más); y por eso entiendo perfecto la belleza y la brillantez que se encuentra implícita en el color gris.
Lo único que a mi no me gusta ya de los días grises es extrañar...
Por último: "Mu" linda y romántica la canción de Rosana, y aunque eso de como resultado la compra de todos los boletos para la rifa de unas "trompadas"; debo decir que tu post me gustó más.
... Otra vez yo, que como siempre me quedé pensando en tantas cosas.
Nada más quería decirte que algo similar ocurre en las madrugadas frías con nieve. Ojalá Dios te regale algún día la posibilidad de poder ver eso también desde una ventana, a esa hora cuando la delgada línea que divide al mundo real del de los sueños se hace más tenue.
Hasta mañana.
geniales letras, estimada compatriota,
un saludo para vos
No todo el mundo deja huella en nuestras vidas, sólo lo hacen las personas especiales y da igual la estación en la que nos encontremos para que siempre sea primavera...no importa cuantas piedras o cordones se interpongan en nuestro camino, es fácil caer ...levantarse resulta dificil pero es una obligación.
Vane, sin duda, el mudo multicolor siempre está ahí, sólo es cuestión de saber o querer verlo.
Saludos
Así como la lluvia hace que de la tierra germinen las plantas y las flores silvestres, y los cultivos más cuidados en el campo, los días de lluvia tienen un efecto similar en el alma de nosotros los humanos.
En algunos germina la nostalgia, que da origen a escritos tan honestos y llenos de belleza y sentimiento, en algunos otros tal vez surgirán cosas que no son tan positivas, pero creo que en general es bueno cuando el color gris se apodera del cielo, porque es como una especie de crisol a través del cual puedes ver lo que mucha gente lleva en su interior.
Hermosos tus escritos como siempre.
Con todo y el caparazón medio adolorido te mando un gran abrazo.
Paso por aquí, como tantas veces a última hora del día, y hoy sólo te dejo una pregunta:
¿Se puede también extrañar tanto a alguien a través de sus letras? ¿Tú qué piensas?... Yo creo que sí.
Buena noche de Diciembre.
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