Por fin llegaste, y de la mano trajiste una fecha especial vestida de aniversario. Aliado de mis musas. Pincel de mis mejores imágenes. Ladrón de mis más profundos suspiros, se los robaste a mi alma sin darme cuenta. Compañero en el más perfecto de los silencios. El que hace de la nostalgia una fiesta con cada atardecer color naranja, donde el sol parece derretirse, y cae poco a poco confundido entre las hojas amarillas que se dejan seducir por el viento, y se van tras el amor de su vida, o se sumergen en una eterna soledad, pero vuelan y se arriesgan a querer buscar, y lo más importante querer encontrar.
Otoño estación mía, nunca hables de nuestros secretos, no le digas a la luna porque me cuesta tanto mirla a ella, y me refugio en el cálido abrazo de tu abrigo. Jamás cuentes quien me provoco aquella tímida sonrisa, y jamás digas porque me viste llorar aquella tarde junto al río.
3 comentarios:
Yo creo que más que referirse al otoño, tu post habla de muchas cosas que estás viviendo tú.
Tienes una manera muy intensa de vivir y de ver la vida. Ojalá que la naturaleza te regale muchos pretextos para inspirarte, muchas historias disfrazadas que finalemente sabremos que son tú.
Muy lindo tu escrito como siempre.
Otra vez yo...
Regresé porque me quedé pensando en tu post y en eso de las estaciones del año, en que siempre te he dicho que me parece muy curioso que cuando allá en tu hermoso país hace frío, en esta tierra desértica hace calor.
Para ti es Otoño y para nosotros está empezando La Primavera, los primeros días cálidos ya se están sintiendo, aunque no del todo, pero eso no es lo importante, lo que me hizo regresar a tu blog fue que me quedé pensando en que así como el otoño es una estación introspectiva, en la que tal y como lo reflejaste en tu blog guardas dentro de ti instantes, presencias y sentimientos que atesoras, la primavera es quizá la oportunidad para deshacerte de lo que no te sirve o te lastima, o simplemente para ver si después de tanto tiempo que has permanecido resguardando tantas cosas, cuando por fin logras deshacerte de todo es que ya no te es útil, en tu interior brota o renace algo nuevo y distinto.
Pienso que puede ser también la posibilidad de abrir o dejar salir todo eso que uno lleva por dentro, sin tener miedo y sin ser demasiado hermético o cerrado como en las estaciones del año en que todo (hasta los abrazos que aún en soledad conservas aunque no sirvan de nada), son hacia adentro...
Me quedo pensando mucho en eso, y también en que así como mucha gente tiene la posibilidad de hacer que resurjan en ti cosas que ni siquiera sabías que tenías y le dan color a tu vida (aunque haya sido por tan pocos días), también en contraposición existimos muchas personas -la inmensa mayoría- que probablemente hemos pasado la vida instalados en las estaciones menos cálidas y por eso cuesta más trabajo renovar lo que se lleva dentro...
En fin... Con tu blog y tus escritos siempre me pasa eso, me quedo pensando mucho tiempo en cosas después de que los leí, y esas son el tipo de cosas que me rescatan al final de un día complicado (hoy lo fue para mi) y por eso te lo agradezco, sólo alguien así puede tener la capacidad de dejarte pensando durante un buen rato de esa manera.
Gracias por compartir esto, y ojalá que en tu vida haya más estaciones cálidas y coloridas, que frías y grises.
¡Hasta mañana!
Como dice Martuchis, por aquí acabamos de recibir (y con los brazos bien abiertos después de estre crudo invierno) a la primavera.
Toda época tiene su lado menos amable, pero también trae consigo un montón de sensaciones agradables. ¡Disfrutemos pues de los contrastes!
Un saludo enorme.
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